08 noviembre 2025

CITAS PARA REFLEXIONAR

 

“Todo el mundo en la política tiene que asegurarse de que no depende de un solo grupo de interés”



Angela Merkel: Hamburgo 1954; Presidenta del Partido Union Democrata Cristiano y canciller de la República Federal Alemana, siendo la primera mujer que ostentó dicho cargo; Doctora en Física y Académica de la Academia Nacional de Ciencias de Alemania; en 1989 y tras la caída del Muro, entró en política actuando como científica pragmática independiente de la ideología.


UN POEMA PARA EL SÁBADO: JUAN RAMÓN JIMÉNEZ

 

Otoño

Esparce octubre, al blando movimiento
del sur, las hojas áureas y las rojas,
y, en la caída clara de sus hojas,
se lleva al infinito el pensamiento.

 

Qué noble paz en este alejamiento
de todo; oh prado bello que deshojas
tus flores; oh agua fría ya, que mojas
con tu cristal estremecido el viento!

 

¡Encantamiento de oro! Cárcel pura,
en que el cuerpo, hecho alma, se enternece,
echado en el verdor de una colina!

 

En una decadencia de hermosura,
la vida se desnuda, y resplandece
la excelsitud de su verdad divina.

 

De: Sonetos espirituales, 1917

 

Juan Ramón Jiménez Mantecón (Moguer, Huelva, 23 de diciembre de 1881-San Juan de Puerto Rico, 29 de mayo de 1958) fue un poeta español. Ganó el Premio Nobel de Literatura en 1956 por el conjunto de su obra, entre la que destaca la obra lírica en prosa “Platero y yo”.

Estudia en la Universidad de Sevilla, pero abandona la carrera de  Derecho y la Pintura para dedicarse a la literatura, influenciado por Rubén Darío y los simbolistas franceses.

Hizo varios viajes a Francia y luego a Estados Unidos, donde en 1916 se casó con Zenobia  Camprubí, a la que había conocido tres años antes.

Este hecho y el redescubrimiento del mar serán decisivos en su obra, e influirán en la escritura de “Diario de un poeta recién casado”. Esta obra marca la frontera entre su etapa sensitiva y la intelectual.

En 1936, al estallar la Guerra Civil española, se exilia a Estados Unidos, Cuba y Puerto Rico. En este último país recibe la noticia de la concesión del Premio Nobel de Literatura en 1956.

 

La crítica suele dividir su trayectoria poética en tres etapas:

Etapa sensitiva (1898-1915): marcada por la influencia de Bécquer, el Simbolismo y el Modernismo. En ella predominan las descripciones del paisaje, los sentimientos vagos, la melancolía, la música y el color, los recuerdos y ensueños amorosos

Etapa intelectual (1916-1936): descubrimiento del mar como motivo trascendente. El mar simboliza la vida, la soledad, el gozo, el eterno tiempo presente. Se inicia, asimismo, una evolución espiritual que lo lleva a buscar la trascendencia.

Etapa verdadera (1937-1958): todo lo escrito durante su exilio americano.

 

La obra poética de Juan Ramón Jiménez es muy numerosa, con libros que, a lo largo de su vida y en un afán constante de superación, repudia o de los que salva algún poema, casi siempre retocado en sus sucesivas selecciones.

La biblioteca del Instituto Cervantes de Nueva Delhi lleva el nombre de Zenobia-Juan Ramón Jiménez.


07 noviembre 2025

UN GOLPE A LA PUERTA DEL CORTIJO

 

Un cuento de Franz Kafka

 

Fue un caluroso día de verano. Mi hermana y yo pasábamos frente a la puerta de un cortijo que estaba en el camino de regreso a casa. No sé si golpeó esa puerta por travesura o distracción. No sé si tan solo amenazó con el puño sin llegar a tocarla siquiera. Cien metros mas adelante, junto al camino real que giraba a la izquierda, empezaba el pueblo. No lo conocíamos, pero al cruzar frente a la casa que estaba inmediatamente después de la primera, salieron de ahí unos hombres haciéndonos unas señas amables o de advertencia; estaban asustados, encogidos de miedo. Señalaban hacia el cortijo y nos hacían recordar el golpe contra la puerta. Los dueños nos denunciarían e inmediatamente comenzaría el sumario. Yo permanecía calmo, tranquilizaba a mi hermana. Posiblemente ni siquiera había tocado, y si en realidad lo había hecho, nadie podría acusarla por eso. Intenté hacer entender esto a las personas que nos rodeaban; me escuchaban pero absteniéndose de emitir juicio alguno. Después dijeron que no sólo mi hermana sino también yo sería acusado. Yo asentía sonriente con la cabeza. Todos volvíamos nuestra vista atrás, hacia el cortijo., tan atentamente como si se tratara de una lejana cortina de humo tras la cual fuera a aparecer un incendio. Lo que pronto vimos, en realidad, fue a unos jinetes que entraron por el portón del cortijo. Una polvareda, al levantarse, lo cubrió todo; sólo brillaban las puntas de las enormes lanzas. Apenas la tropa había desaparecido en el patio, cuando debió, al parecer, hacer dar vuelta a sus corceles, pues volvió a salir en dirección nuestra. Aparté a mi hermana de un empellón, yo me encargaría de poner todo en orden. Ella no quiso dejarme solo. Le expliqué que para que se viera mejor vestida ante los señores debía, al menos, cambiarse de ropas. Porfin me hizo caso e inició el largo camino a casa. Ya estaban los jinetes junto a nosotros y casi al tiempo de apearse preguntaron por mi hermana.

-No está aquí de momento -fue la temerosa respuesta- pero vendrá mas tarde.

La contestación se recibió con indiferencia. Parecía que, ante todo, lo importante era haberme hallado. Destacaban, de entre ellos, el juez, un hombre joven y vivaz, y su silencioso ayudante llamado Assmann. Me invitaron a pasar a la taberna campesina. Lentamente, balanceando la cabeza, jugando con los tiradores, comencé a caminar bajo las miradas severas de los señores. Aún creía que una sola palabra sería suficiente para que yo, que vivía en la ciudad, fuese liberado, incluso con honores, en ese pueblo campesino. Pero luego de atravesar el umbral de la puerta, pude escuchar al juez que se acercó a recibirme:

-Este hombre me da lástima.

Sin duda alguna, no se refería con esto a mi estado actual sino a lo que me esperaba en el futuro. La habitación se parecía más a la celda de una prisión que a una taberna rural. De las grandes losas de la pared, oscura y sin adornos, pendía, en alguna parte, una argolla de hierro, y en el centro de la habitación algo que era medio catre y medio mesa de operaciones.

¿Podría yo respirar otros aires que los de una cárcel?. He aquí el gran dilema. O, mejor dicho, lo que sería el gran dilema, si yo tuviera alguna perspectiva de ser dejado en libertad.

FIN


05 noviembre 2025

LOS PARQUES NO SON SOLO PARA EL VERANO

 

Artículo de María Del Carmen Moreno Garcia, Profesora jubilada honorífica en el Área de Geografía Física, Universitat de Barcelona. Publicado en la revista digital The Conversation.

Con las olas de calor del pasado verano en España, se ha hablado tanto sobre los refugios climáticos urbanos que incluso esa expresión se ha hecho ya popular entre los ciudadanos, oyéndose con frecuencia esos términos en cualquier conversación cotidiana.

Las redes de refugios climáticos existentes en algunas ciudades están integradas por diferentes espacios o equipamientos municipales, algunos interiores, como bibliotecas o centros cívicos, y otros exteriores, como parques, jardines o interiores de manzana. Es previsible que su número siga aumentando.

Es en este contexto cuando no está de más recordar las razones que explican por qué los parques y jardines urbanos siguen siendo el refugio climático natural por excelencia, el más sostenible. Tal como se ha comprobado para Barcelona, la mayoría de las personas adultas de más edad (54 %) prefieren utilizarlos de forma habitual para mitigar el calor. No obstante, también ofrecen en los meses más fríos otras ventajas socioambientales: mitigan el frío y el viento, mejoran la calidad del aireatenúan el ruido y sirven de lugar de encuentro.

Árboles para el verano y árboles para el invierno

Los parques y espacios verdes desempeñan un importante papel en las ciudades, ya que amortiguan las oscilaciones de temperatura, aportan oxígeno a la atmósfera urbana, refrescan el aire y moderan las velocidades extremas de viento.

El diseño de la vegetación en los parques urbanos puede adecuarse para interceptar la radiación solar en situaciones de excesivo calor, o bien para no interferirla cuando lo que se desea es el efecto opuesto.

Los árboles, por ejemplo, interceptan cantidades de radiación solar directa que varían dependiendo de la densidad de su follaje, del tipo de copa y de si forman una capa o dosel suficientemente espeso. De la radiación que incide, una parte es reflejada (10-25%), mientras que entre un 15 y un 35 % queda absorbida por el árbol para utilizarla en los procesos de transpiración y fotosíntesis durante las horas de máxima insolación, dejando pasar, finalmente, entre un 30 y un 50 %.

Algunas especies de los géneros Acer y Quercus, como el arce y el roble, pueden llegar a absorber y reflejar en torno al 90 % de la radiación directa.

En los climas templados de latitudes medias, la necesidad de interceptar parte de la radiación solar directa varía según la época estacional. En los meses cálidos es deseable reducir al máximo la cantidad de radiación incidente que llega a la superficie. En cambio, en los meses fríos, será al contrario. Por esta razón son recomendables los grandes árboles de hoja caduca (plátano de sombra, almez, sófora, tipuana…), ya que se comportan como “persianas perfectas”: proporcionan sombra en verano y, en cambio, dejan pasar en mayor medida la radiación en invierno.

Efectos en la precipitación y el viento

El arbolado urbano también participa en el control de la precipitación, al interceptar una parte y, con ello, aminorar el impacto de las gotas en el suelo.

Los árboles y las plantas, debido al proceso de transpiración, desprenden vapor de agua a través de los estomas (poros) de las hojas, por lo que son indispensables para rehidratar el ambiente excesivamente seco del medio urbano.

Los árboles pueden reducir, asimismo, la velocidad del viento y crear áreas protegidas, interfiriendo en los procesos de enfriamiento del aire por la evaporación. Con ellos se puede controlar el viento ya sea por obstrucción, conducción, desviación o filtración. El efecto y el grado de control varían, en todo caso, con el tamaño de las especies, así como con su forma y densidad. Árboles de hoja perenne, como

Amortiguación de la temperatura

La vegetación concentrada en los parques y jardines influye también directamente sobre la temperatura de la ciudad, amortiguando los valores elevados del verano y, en especial, disminuyendo la intensidad del efecto de la isla de calor urbano.

Así, es frecuente que en los parques (sobre todo, si son de ciertas dimensiones) se observe una significativa disminución de la temperatura en comparación con los lugares edificados de alrededor. Este efecto queda reflejado en los mapas de temperaturas de algunas ciudades, donde los parques aparecen como islas, islotes o células de frescor, con una menor temperatura, una mayor humedad relativa y producción de oxígeno.

El efecto se deja sentir, sobre todo, con vientos débiles o en calma y en noches claras o despejadas, justo cuando la isla de calor urbana está bien desarrollada. En ocasiones, la diferencia térmica provoca ligeros flujos de aire fresco que se extienden por las calles próximas, llamados “brisas de parque”.

En las ciudades españolas este efecto microclimático se conoce particularmente bien en el caso de Madrid, con varios estudios sobre el Parque de El Retiro, la Casa de Campo y otros. En un parque característicamente urbano como El Retiro (120 hectáreas de extensión) es bastante frecuente la aparición de una célula fresca de varios grados de diferencia en relación con las temperaturas de los barrios limítrofes.

De igual modo ocurre en el caso de Barcelona, con algunos de sus parques como el Turó Parc o el Parque de la Ciutadella. En este último, el más extenso de la ciudad (31 hectáreas), se ha llegado a medir a primeras horas de la noche una diferencia térmica de algo más de 5 °C entre un punto central del parque y las calles de su entorno.

Los parques urbanos son, por tanto, un elemento indispensable en el proceso de reverdecimiento de las ciudades. Un auténtico refugio climático natural que hay que seguir cuidando y fomentando.


03 noviembre 2025

LO QUE OCURRIÓ EN UNA BARBERÍA

 

Hace más de sesenta años en una barbería de la Bda. del Carmen, en Melilla, donde siempre se hablaba de fútbol y de mujeres, porque de política nadie se atrevía a hacerlo, había un fígaro, apestando a sudor y a “Ideales” de papel trigo, con una clientela fija de suaves afeitados, y pelados con maquinilla a mano, de las que daban tirones en las patillas y en el cogote.  Recuerdo una tarde de verano, esperando el turno, con mis cinco pesetas en el bolsillo, cuando entró un hombre, con la hora cogida y un niño de la mano, solicitando los servicios del maestro. Al chavea yo lo conocía del colegio. El cliente deseaba que a él lo afeitara y pelara a navaja primero, y a su “hijo” que lo hiciera después. Mientras el aprendiz de barbero, que era del barrio de  Horcas Coloradas, me metía la maquinilla para dejarme al estilo L´Oparisié, el maestro al cliente, con todo su esmero, le hacía su corte de pelo a navaja y luego, vaciándola en  el suavizador de cuero, le hizo un afeitado dejándole el rostro como el culo de un niño chico aplicándole al terminar el oloroso “Floid Mentolado”.  Una vez en pié y dispuesto a marcharse le dijo al barbero: “Ahí le dejo a mi hijo, ahora mismo vengo a por él y le abonaré los dos servicios”. Mientras que el de Horcas Coloradas, aprendía el oficio, haciéndome los consabidos trasquilones, el maestro al ver los destrozos en mi cabeza, muy contento canturreaba, con muy poca gracia: “¡El borrico mal pelao, a los tres días emparejao!”, aunque él siempre me emparejaba los desperfectos del aprendiz.  Apenas el cliente se marchó, el barbero que ya le había metido mano a la chorla del chavea, le preguntó donde vivían. El niño que no había dicho ni mú en todo el rato, muy seriecito, como acojonado, le dijo que ese hombre no era su padre, y que él vivía en La Alcazaba, y que se lo encontró cerca del Circo Ruzafa (actual Hotel Ánfora), proponiéndole que un amigo barbero lo pelaría de balde.  El hombre, que ya le estaba recortando las patillas y el cogote, se quedó con la navaja en vilo, cagándose en todo lo que había que cagarse sobre la familia del caradura, y muy particularmente en la señora que lo trajo a la vida.  Imagínense el mal rollo que yo tenía, con el cabreo del barbero, el niño a medio pelar, y yo con la maquinilla del aprendiz encima de una de mis orejas. Menos mal que todo acabó en un “susto”, con el niño amedrentado, pero pelado, creyendo que iban a llevarlo al cuartelillo de los municipales del Mercado de C/ Margallo,  y yo saliendo por la puerta de la barbería muerto de la risa viendo la jeta del barbero con un cabreo de cojones. Años más tarde, cuando aquél niño y yo vestíamos de caqui, y pelados casi a rape, lo comentábamos con todo el cachondeo mientras hacíamos guardia en el Hospital Militar “Doker”, ya que pertenecíamos a la Agrupación de Sanidad Militar, en Batería J, junto al Rgto. De Infantería Melilla nº 52.

Esta anécdota me recordó uno de los “Chisnetos” (soneto) que mi amigo Ricardo Redoli, prologuista de mi libro “Breve Cronología Histórica de Melilla” (2002), publicó hace varios años.

 

“EL HIJO DEL BARBERO Y SU CLIENTE”

 

Un barbero, buscando el beneficio

de un hijo sin estudios y vagante,

en aras de un futuro más brillante,

le inició de aprendiz en el oficio.

Le buscó un parroquiano a su novicio:

un hombre bonachón y tertuliante,

cliente de fiado, y tolerante,

al que prestaba siempre buen servicio.

El joven, en el día de su estreno,

blandiendo la navaja algo indeciso,

le asestó un corte seco a su cliente.

El padre, que de nada estaba ajeno,

al ver salir la sangre, de improviso

fue y largó un bofetón furiosamente.

Tres cortes más siguieron al primero,

y, a cada uno, le siguió un metido

destinado al zagal, mas recibido

por el pobre cliente del jifero.

Un quinto corte, que será el postrero,

le arrancó, con la oreja, un gran quejido.

En el suelo, el apéndice caído

recordaba la gloria de un torero.

Y el cliente, mirando al alfajeme,

cuyo genio conoce y ahora teme,

le dice al aprendiz con desconsuelo:

“Pisa la oreja y déjala en el suelo,

que, si tu padre larga otra colleja,

seguro que me arrancas la otra oreja”.

 

 

Juan Aranda


01 noviembre 2025

ACTIVIDADES PROGRAMADAS POR AMADUMA PARA NOVIEMBRE 2025


ACTIVIDADES PROGRAMADAS POR “AMADUMA” DURANTE EL MES DE NOVIEMBRE DE 2025.

 

 

DÍA 14. VIERNES. Excursión programada a Antequera. Visita de la Villa Romana de la Estación y de los Dólmenes. Dicha visitas se realizarán en dos grupos. Desayuno en ruta y almuerzo en restaurante. Tiempo libre después. Salida a las 8,00 de la mañana desde la parada de autobuses de la Avda. de Andalucía (frente a La Caixa. Precio 52,- euros.

 

DÍA 17. LUNES. Repetición de la visita guiada a la exposición del Patrimonio de la Casa de Alba en el Palacio Episcopal. A las 12,00 horas. Solo podrán acudir los socios que ya están inscritos para esa fecha. Actividad gratuita para los socios.

 

DÍA 19. MIÉRCOLES. Visita guiada por diversos hospitales de Málaga con la profesora Doña Ana Berrocal. El número de personas que podrán acudir es limitado.

Se comunicará la hora y el lugar del encuentro. Actividad gratuita para los socios.

 

DIA 21. VIERNES. Conferencia de la profesora Doña Ana Berrocal en el salón de actos de Cajamar. Título: “La historia de los hospitales malagueños”. Lugar: en el propio salón. Hora: siete de la tarde. Actividad gratuita para los socios.

 

DÍA 24. Repetición de la visita guiada a la exposición del Patrimonio de la Casa de Alba. Hora: 11,00 de la mañana. Sólo podrán acudir los socios que estén ya inscritos para ese día. Si hubiera nuevas demandas se solicitará otra visita. Actividad gratuita para los socios.

 

Se comunica a todas las personas interesadas en participar en la comida de Navidad que tendrá lugar el día 13 de diciembre, sábado, en los salones del Hotel Málaga Palacio, que a partir del próximo miércoles, día 5 de noviembre, podrán inscribirse y hacer efectivo su importe de 55,- euros en la sede de Amaduma, Pasaje de la Trini, 6. Igualmente atenderemos en el despacho de El Ejido desde los martes y jueves de cuatro y media a siete de la tarde. Se os envía el menú para vuestro conocimiento.

Con objeto de facilitar las inscripciones de los socios a las excursiones y viajes, y evitar las esperas y madrugones, hemos establecido una nueva forma que confiamos en que de resultado.

En la próxima salida programada a Antequera podrán hacer la inscripción, (no más de dos personas) a través del whatsapp de Amaduma, 640.53.00.91 el lunes, día 3 de noviembre, desde las nueve en punto de la mañana (ni un minuto antes). Se les confirmará su plaza al siguiente día y se indicará la fecha para abonarlo en Nautalia.

Para que esta nueva fórmula sea efectiva rogamos, por favor, se respete el horario.

Estamos preparando una visita a la cripta de la Iglesia de la Victoria y al Mucam. Se os informará de las fechas.


 

CITAS PARA REFLEXIONAR

 

“El dialogo es la mejor herramienta para resolver conflictos y construir puentes”



Adela Cortina : Valencia 1947; Catedrática de Ética y Filosofía Moral dirigiendo su magisterio a la economía, la empresa y la discriminación de la mujer; aunque siguió la ética de Habermas amplió ésta al diálogo; entre sus nombramientos, solo haremos referencia a los de: Doctor Honoris Causa por las Universidades de Valencia y Salamanca, Premio Nacional de Ensayo, de Crítica Literaria y de Derechos Humanos, Gran Cruz de La Orden del Merito Civil, Miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas ………


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